La Escuela La Minerva de Calella se organiza alrededor de un patio cuadrado central, definido per dos diedros, uno en planta baja contiene las aulas de enseñamiento infantil i el otro da cabida a todo el aulario de enseñamiento primario en tres plantas mientras que, en la planta baja, aloja el acceso, la recepción, secretaria y dirección y la cocina con el comedor. Sobre la base de obra vista de la planta baja se alzan las tres plantas de estuco blanco con una disposición de las ventanas y los ventanales acordada con la orientación, con el asoleo de cada fachada. La composición y la disposición de las aperturas, junto con todos los elementos de protección: aleros, porches y voladizos, es de una racionalidad mediterrania, de una claredad y luminosidad espectacular. El gimnasio y los vestuarios están separados de la escuela, al otro lado de una parque, a nivel del tercer piso del aulario; la pista deportiva todavía está más arriba. Para salvar los ventidós metros de separación hay un puente cubierto, majestuoso y sereno, que vuela por encima del parque. Este elegante vínculo entre las aulas y el area deportiva, además de un mirador, es, en cierta medida, un símbolo de la escuela.